La Cumbre Europea de Economía Social en Murcia reclama un nuevo y decidido impulso para el sector, como medio para alcanzar la autonomía estratégica de la Unión Europea
La Semana y Cumbre Europea de la Economía Social reunió del 15 al 19 de septiembre en Murcia a representantes gubernamentales de 27 países, entre ellos la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz; miembros del Parlamento y del Comité Económico y Social Europeo, y altos representantes de la Comisión Europea, encabezados por la vicepresidenta ejecutiva y comisaria de Derechos Sociales, Capacidades y Empleo de Calidad, Roxana Mînzatu. La Cumbre contó con más de 650 participantes, entre ellos 100 ponentes internacionales y representantes de 200 organizaciones, para reivindicar y garantizar la plena ejecución del Plan de Acción Europeo de la Economía Social, e integrar este modelo empresarial en el nuevo Marco Financiero Plurianual de la UE (2028-2034).
El evento finalizó con la comisaria Mînzatu reafirmando los compromisos clave de la Comisión para reforzar la Economía Social y reconociendo su valor estratégico para la cohesión y la resiliencia de toda Europa: “Tienen mi total compromiso de que trabajaré con ustedes para seguir impulsando las ambiciones de la Economía Social”, afirmó. En su discurso, Mînzatu desgranó algunas de las principales áreas de trabajo en las que va a concentrar su actuación, desde el refuerzo del Plan de Acción con nuevas medidas; asegurar que la Economía Social gane peso en la contratación pública y en la Normativa comunitaria sobre las Ayudas de Estado; así como arbitrar mecanismos para mejorar el acceso a la financiación de este modelo empresarial. Y afirmó también que el conjunto de la Economía Social “necesita ser mucho más grande de lo que es ahora” para alcanzar la resiliencia y el valor político que merece. Se posicionó como una aliada de este modelo y agradeció la invitación, esperando trabajar intensamente en las políticas mencionadas.
La Economía Social como solución a los retos actuales y para la autonomía estratégica de Europa
Por su parte, Juan Antonio Pedreño, presidente de CEPES y Social Economy Europe, calificó muy positivamente los debates de la Cumbre. “Este acto evidencia el férreo compromiso de todas las instituciones y gobiernos presentes, y el consenso sobre el papel de la Economía Social como solución a los retos actuales y para la autonomía estratégica de Europa”, afirmó. Pedreño demandó la necesidad de que el próximo marco financiero plurianual priorice recursos para el sector e hizo un llamamiento para que, bajo el liderazgo de la Comisión, la Economía Social se sitúe en el centro de todas las estrategias europeas. “No pedimos privilegios, pedimos coherencia, que los fondos europeos se canalicen hacia modelos empresariales que conjugan competitividad y solidaridad, que generan empleo estable y que, a diferencia de otros, nunca se deslocalizan”, ahondó Pedreño.
Mantener los esfuerzos y el liderazgo de la UE en Economía Social
Asimismo, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, advirtió también que Europa “no puede retroceder en su dimensión social”, y manifestó su preocupación por la supresión de la Unidad de Economía Social de la DG Grow emprendida por la nueva Comisión Europea. En cambio, los esfuerzos que realiza España para fomentar este modelo empresarial están siendo cuantiosos, como el diseño de políticas e instrumentos para financiarla, el impulso de dos resoluciones en la Asamblea General de Naciones Unidas, o de la Recomendación del Consejo de la Unión Europea, entre otros.
Precisamente en el ámbito europeo, la titular de Trabajo y Economía Social pidió reforzar la contratación pública reservada a las empresas de economía social, propiciar las ayudas estatales en base a marcos normativos que reconozcan y apoyen la especificidad de dichas entidades, y aumentar la cooperación con el Intergrupo de Economía Social del Parlamento Europeo para una mayor visibilización de este ecosistema. “La Unión Europea debe ejercer un papel de liderazgo internacional en la Economía Social”, concluyó la vicepresidenta, que finalizó anunciando que España presidirá junto a Francia el Comité de Seguimiento de la Declaración de Luxemburgo, para fomentar la coordinación de políticas que impulsen la Economía Social en el conjunto de la Unión Europea (UE).
Intergrupo de Economía Social
La voz del Parlamento Europeo recayó en las copresidentas del Intergrupo de Economía Social y Servicios de Interés General, que participaron en una audiencia centrada en los ejes sobre los que se articuló la Cumbre. En este sentido, la europarlamentaria Maravillas Abadía, recogiendo los datos del estudio más reciente de CIRIEC y Euricse para la Comisión Europea, destacó que “ya nadie duda de que la Economía Social sea un actor principal en Europa, es un motor de empleo que representa más de 4,3 millones de empresas y entidades, y 11,5 millones de empleos directos, lo que equivale al 6,3% de la población ocupada en Europa y una facturación por encima del billón de euros”.
Abadía remarcó que “hay que potenciar la financiación y destacarla como prioridad de cara al marco financiero plurianual. La Economía Social no puede verse como un mero instrumento, sino que tiene que concebirse como una palanca estratégica de la UE”. La eurodiputada Idoia Mendia manifestó también su compromiso: “Europa necesita instrumentos como la Economía Social que ofrece certezas y garantiza valores”, resaltando que este modelo empresarial debe estar presente en todas las decisiones de la Eurocámara y políticas europeas.
Reactivación del Comité de Luxemburgo
Otro de los hitos destacables de esta Cumbre ha sido la reactivación del del grupo de trabajo (Comité de Monitoreo de la declaración de Luxemburgo) que ha reunido a representantes gubernamentales de Bélgica, Bulgaria, Eslovaquia, Eslovenia, España, Francia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Polonia y República Checa. El encuentro ha reafirmado el compromiso de todos los países en la defensa y promoción de la Economía Social. Además, el Comité se ha propuesto ser un instrumento mucho más activo y dinámico sobre todo visibilizar este modelo empresarial propiciando su crecimiento. Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia y vicepresidente del Comité Europeo de las Regiones, expresó su orgullo por haber acogido esta Cumbre Europea de Economía Social, de la mano de CEPES y Social Economy Europe. Recordó que solo en dicha región en los últimos 10 años se han construido más de 1.700 empresas de Economía Social, gracias al dinamismo del sector y a los apoyos que recibe de la propia Región de Murcia junto a las ayudas estatales y europeas. “Este dinamismo viene a confirmar que estamos ante un modelo plural, resiliente y capaz de generar oportunidades en los momentos de mayor incertidumbre”, concluyó.
La amplia agenda de la Semana Europea de Economía Social se completó con el Comité Ejecutivo de Social Economy Europe, Junta Directiva de CEPES, una recepción en el Ayuntamiento de Murcia, la gala de los III Premios Europeos de la Economía Social y el Día de las Empresas de Inserción. Igualmente el IEMED, Instituto de Economía Social del Mediterráneo, celebró dos jornadas con representantes de 11 países del Sur del Mediterráneo y, por último, hubo un encuentro del programa RESEES (Reinforce Regional Social Economy Ecosystems and Stakeholders capacity), así como una jornada sobre “La mujer en la empresa”.